Dibucedario 2021 / 1 / Abubilla
Abubilla suena a sueño roto o a pañuelo de recamada tela. A su placido albedrío, las palabras no confinan siempre un significado certero sino que calan y hurgan a quien las escucha. Si fuese únicamente pájaro, perderíamos el apresto fonético. Hemos perdido la belleza del lenguaje al imponerle el escrutinio cartesiano de la razón. Si la voluntad elige una residencia perdurable, podemos aceptar que Abubilla quede festejadamente en ave, en milagro o en alarde generoso que emprende el vuelo. Al observar su danza sublime se aligera la desazón de las horas, nos apropiamos del don de la ebriedad. Es especie efímera con la que las nubes pierden su compostura. En los primeros tiempos, en ese oscuro albor con ilusión de eternidad, Abubilla enfermó de soledad. Volaba sin la audacia anhelada. Se crispa si se le enjaula y canta un vértigo de llanto.
Ilustración de Ramón Besonías
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