18.2.23

El blues más antiguo registrado

 



Solo existe el periodo precámbrico. Ni desamortizacion de Mendizábal ni listas negras en Hollywood. Solo oscuridad y ese ruido con el que el cielo intima noviciamente con la tierra. De entonces surge la posibilidad de que algo prospere y alguna divinidad se engolosine del invierno recién caído, pero todo es sigilo y premonición. Un milagro en construcción. Un plan secular. La luz está probándose. El tiempo es una representación de la lentitud. Ni catedrales ni hachas de piedra. Ni metabolismo ni danzas húngaras. Era el esplendor de las tinieblas. Era el sueño de Caín antes de que Abel lo desnucara. Los asteroides colisionan en el firmamento. Hay cráteres del tamaño de la península de Crimea. La vida unicelular no da para epopeyas. Gilgamesh espera, Euclides no pasea las calles de Alejandría. El triángulo es una utopía. Nada le concierne a la geometría. Todo es autorreplicación. El silicato de aluminio es el rey de los compuestos minerales. Walt Disney es un actor del futuro. Me gusta la criogénesis, le dice a Mickey en el éter. Luego morirá en el hospital Saint Joseph, Burbank, en el año en que yo nací. El cáncer es una mosca que hace diabluras en la sangre. Se la ve propulsarse por su cauce. Está divirtiéndose. Las moscas del cáncer odian el hielo y los salmos. Solo aman Dixieland. El 28 de enero de 1958 se crea en Dinamarca el juego de interconectables bloques de plástico que inventa Ole Kirk Christiansen. No consta que Walt y Ole tomaran café en alguna terraza de París. Ni que cotejaran ideas sobre la imaginación para que los niños del siglo XX no se desmadraran y ocuparan su tiempo en entretenimientos lúdicos. Ole era un carpintero modesto que medró con tesón. Walt está en un búnker en Siberia. Reposa en una sala de doscientos metros cuadrados en la que un operario pulsa botones de un panel para que el corazón no se detenga. Cuando Walt vuelva al mundo hará una película animada sobre el periodo precámbrico. La banda sonora será tipo Wagner. Valkirias y opúsculos tenebrosos. Una tormenta. Se hará una versión jugable. Ya hay ceos de la compañía haciendo números. 

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