28.3.23

Un año de jazz


 Hoy hace un año que recibí en casa mi libro de jazz. A los libros que uno publica se les dispensa un amor que no rivaliza con los ajenos (tantos) que nos marcaron, pero nos pertenecen, dicen de uno lo que a veces no es posible manifestar de ninguna otra manera. Pronto habrá otra criatura a la que acoger en casa y hacer correr por el mundo. Una vez ahí, en manos del lector, es cuando crecen, cuando todo cobra sentido. Gracias a quienes lo leísteis. Todavía lo miro con arrobo grande de padre feliz.

No hay comentarios:

Comparecencia de la gracia

  Por mero ejercicio inútil tañe el aire el don de la sombra, cincela un eco en el tumulto de la sangre. Crees no dar con qué talar el aire ...