5.3.21

Dietario 64

Gustav Meyrin escribió Der Golem, un librito expresionista. Ahí habla de la vida, habla de su anverso, el mito del regresado, la leyenda del recompuesto. Todos los pájaros de Praga hacen sus defecaciones matutinas en la cabeza de su criatura. 

El verdadero nombre de Dios carece de morfemas de género, carece de morfemas de número. 

Nunca he estado en Chinatown ni en la calle Bourbon, no he escuchado a Brahms en Trieste ni me han besado en la periferia de una de esas ciudades industriales de la cuenca del Rin, no he sido instruido en las bondades de las hierbas aromáticas ni se me ha confiado el secreto numen con el que respira el cosmos.

La alcoba de Agatha Christie tiene un muerto debajo de la cama.

Algunas familias se reúnen alrededor de la mesa y se dicen las verdades en orden alfabético.

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