Siendo caprichoso y de inclinaciones volubles como soy, no me puedo permitir redactar un acta de buenos propósitos para el año recién empezado. En todo caso puedo hacer lo contrario y firmar una que contenga los vicios a los que encomiendo la salvación de mi alma. Aparto las buenas intenciones en la certeza de que no tendré tesón para cumplirlas....
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2 comentarios:
Lo importante es encomendar bien la salvación del alma, sí.
No es mal propósito.
Me las pido para mí. Son las mías.
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