Quieren cerrar la España que abrió Santiago con su espada y dar un portazo que no soliviante a nadie, aunque saben que todo está en un silencio violentado por la agencia EFE y por las radios de los obispos y por los periódicos de los paganos. Cerrar España como un acto de fe o como un capricho.Quieren enterrar la Historia o, en todo caso, solicitar un enterrador que le dé sepultura, cristiana o laica, con la pompa y la circunstancia debida. Han sido muchos siglos de guerras y de guerrillas, de pactos y de mentiras, de dioses reventados por el ruido de la hombres y de hombres reventados por los ruidos de los dioses. Unos lampan por acabar ya con lastres del pasado y otros se frotan las manos con la posibilidad de regresar a ese pasado glorioso que ahora parece vivir en la cuerda floja. Vuelven los presidentes democráticos a la palestra mediática en una suerte de hagiografía caprichosa, más pendiente de la anécdota frivolona que del dato histórico. Vuelve Aznar con su milicia de nietos y su yerno empresario a dar unas pinceladas de su genio lingüístico. Vuelve González con la tortilla de patatas, la chaqueta de pana y la amistad rota con Alfonso, que le pasaba las notas para asaltar La Moncloa. El sueño monclovita tiene muchos adeptos. ZP sale hoy con un video ortográficamente incorrecto que va a darle cuatro año de planes de estudio y una oportunidad más para enmendar lo errado. O el desliz fonético le manda al paro, que es una oposición incómoda, que ocupa menos titulares y no trae tantos ratos de lujuria política. El poder, ya lo sabíamos, tiene su erótica y todo eso. Cuando uno habla muy alto se le entiende todo. Ellos no tienen culpa, los pobres. Es el vacío legal o el vacío cultural o el vacío moral que ocupa el prime time televisivo, que es tanto como decir el elan vital de los clásicos. España se desmembra, lo hemos escrito ya muchas veces, pero al final no llega la tijera a la costura, no alcanza el mandoble el corazón y el herido se incorpora más fuerte. Se nos educa de una forma y luego la vida borra lo que tanto esfuerzo ha costado aprender. A mí me dieron muchas clases de Historia y ahora parece que me las salté todas. Debí habérmelas saltado, bien mirado ahora. Haberme ido de parranda filológica por los bares cercanos al Instituto. Bocadillos de palimpsesto. Y una Cruzcampo, oiga. Vuelta a España: Nadal ha perdido con un argentino en el Master de Madrid. Por lo menos tenemos Master.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
La mujer pembote
Me agrade rehacer cuentos que hice. Les sucede a los cuentos lo que a las personas. No son los mismos, cambian cada vez que se leen. Ya sab...
-
A elegir, si hubiera que tomar uno, mi color sería el rojo, no habría manera de explicar por qué se descartó el azul o el negro o el r...
-
Con suerte habré muerto cuando el formato digital reemplace al tradicional de forma absoluta. Si en otros asuntos la tecnología abre caminos...
-
Celebrar la filosofía es festejar la propia vida y el gozo de cuestionarnos su existencia o gozo el de pensar los porqués que la sustenta...
1 comentario:
Y Alonso ha quedado segundo. Eso es palimpsesto también. ¿No, entonces ?
Virgil29
Publicar un comentario