Por mero ejercicio inútil
tañe el aire el don de la sombra,
cincela un eco
Crees no dar con qué talar
el aire cuando todo es bosque
y la mano escudriña la sangre
por si no prospera en su cauce.
Por si la sombra.
Así la poesía traza en lo invisible
su tangible dibujo de luz.
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