Cada noche juegan al ajedrez. Terminan durmiéndose, pero siguen con la
partida en sueños. El primero que despierta pierde.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Comparecencia de la gracia
Por mero ejercicio inútil tañe el aire el don de la sombra, cincela un eco en el tumulto de la sangre. Crees no dar con qué talar el aire ...
-
A elegir, si hubiera que tomar uno, mi color sería el rojo, no habría manera de explicar por qué se descartó el azul o el negro o el r...
-
Con suerte habré muerto cuando el formato digital reemplace al tradicional de forma absoluta. Si en otros asuntos la tecnología abre caminos...
-
Celebrar la filosofía es festejar la propia vida y el gozo de cuestionarnos su existencia o gozo el de pensar los porqués que la sustenta...
2 comentarios:
Acuérdate de Jovellanos, Emilio. "El sueño de la razón produce monstruos".
Metido en el fango demócrata/republicano de esta noche (aunque no voy a perder mucho tiempo en el asunto) me parece que el sueño de la razón produce (ahora) monstruos mediáticos y que la partida de ajedrez es un tablero en el que las fichas son criaturitas humanas y se despiertan algunos y las mueven a antojo, amigo mío. Pero es muy tarde, y la cabeza (algún exceso reciente) me pide que no piense en Jovellanos. Por favor, Jovellanos, no. Salud y entusiasmo, please.
Publicar un comentario