1.7.17
De Dios
No sé quién adhirió el adjetivo metafísico, de índole moral, al sustantivo temblor, que es una cosa enteramente física. Lo leí o lo escuché hace tiempo y me sigué pareciendo un prodigio metafórico. Vivir es una especie de temblor metafísico. Quien no sienta a diario esa punzada está huérfano. No es que se crea en Dios o se deje de creer. La idea de lo que no conocemos es inherente a lo humano, aunque luego existen grados y haya quien comulgue y rece y quien sólo sienta el murmullo de la divinidad o la desoiga o no la perciba. El mundo es de los que escuchan, no de los que hablan.
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