tag:blogger.com,1999:blog-32420824.post7606312394599287033..comments2024-03-26T10:52:37.571+01:00Comments on . : Beber, vivir, amarEmilio Calvo de Morahttp://www.blogger.com/profile/02670708838283480230noreply@blogger.comBlogger6125tag:blogger.com,1999:blog-32420824.post-57854999597487092382010-04-16T14:57:20.027+02:002010-04-16T14:57:20.027+02:00Se bebe a sabiendas de lo que significa beber. Inc...Se bebe a sabiendas de lo que significa beber. Incluso cuando hay exceso. La juventud de ahora, coincidimos todos, se pierde en la ingesta sin razones. Para todo, incluso para el exceso, debe haber un argumentario. Es viernes. Se entiende.Emilio Calvo de Morahttps://www.blogger.com/profile/02670708838283480230noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32420824.post-48468514223687427252010-04-15T07:29:20.659+02:002010-04-15T07:29:20.659+02:00Impagable documento gráfico, sr. Emilio. Se requie...Impagable documento gráfico, sr. Emilio. Se requiere mucho temple para no derramar la cerveza viendo al vecino, a la vecina, mejor dicho, tomarse una de esas dimensiones. Todo en la foto tiene dimensiones. Alemania es un país de mnuchas dimensiones. Habrá que ir a Munich en Octubre, no crees?. Lo otro que cuentas, más luctuoso, no tiene cabida en este comentario alegre. Sentirlo, ya está. Y a seguir bebiendo. Brindemos, brindemos, brindemos. 3 copas por los que no están.Teniente Bebido !noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32420824.post-45725241217025732532010-04-14T22:09:35.570+02:002010-04-14T22:09:35.570+02:00Alegría de tu vuelta tras un descanso. Qué mejor m...Alegría de tu vuelta tras un descanso. Qué mejor motivo para una copa que encierra en su fondo algo más que el líquido que flota a la espera de una garganta ávida de nuevas sensaciones. Y sí, en el trayecto hemos dejado a muchos amigos de farra en la cuneta. Es ley de vida, y la vida siempre se las cobra...<br />Un abrazo.Casianohttps://www.blogger.com/profile/05345688905607223634noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32420824.post-37296140829169481182010-04-14T17:28:53.610+02:002010-04-14T17:28:53.610+02:00Me alegra tu regreso a ese garito virtual de palab...Me alegra tu regreso a ese garito virtual de palabras compartidas, donde es imposible embriagarse de otro hidromiel que no sea el que destilan a destajo nuestras letras.<br /><br />Al leerte me sale una sonrisa a medio hacer. Quizá sea el efecto de la edad sobre nuestra memoria, pero qué pronto olvidamos que nuestra adolescencia estuvo, igual que la de ahora, ausente de razones para beber o de detector natural que limitase nuestro deseo. <br /><br />Cambian las razones, las edades de iniciación, los lugares, quizá la compañía, los centímetros cúbicos de alcohol en sangre,... Pero, ¿ha cambiado algo? <br /><br />La única impronta que preside esta generacón de imberbes bebedores es el hecho de que no soportan beber solos. Emborracharse es un acto social, un rito tribal, una excusa para huir del adocemamiento familiar y escolar, la falta de horizontes laborales, aquello que les espera cuando esa dama remilgada y mentirosa llamada adultez les toque la voluntad y les envenene de fría sensatez y autocomplacencia. Antes que sea así, que no digan que no viví, aunque no recuerde con quién ni dónde.<br /><br />Este nihilismo anhela a gritos respuestas, conflictos por los que merezca mantenerse sobrio. Hasta entonces, otra copa, por favor.Ramón Besoníashttps://www.blogger.com/profile/04214731201551693685noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32420824.post-73650063103455161032010-04-14T15:21:33.393+02:002010-04-14T15:21:33.393+02:00Completo a la par que sentimental, como siempre, e...Completo a la par que sentimental, como siempre, emilio, un abrazo grande. Fernando.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-32420824.post-60110866070764557402010-04-14T13:02:10.607+02:002010-04-14T13:02:10.607+02:00Más razón que un santo, Emilio. Además la juventud...Más razón que un santo, Emilio. Además la juventud de hoy no respeta el gusto por beber, no bebe con cabeza y bebe a lo bestia sin tiento ninguno. Yo bebo lo mio y lo del vecino pero sé frenar, eso decimos todos, ya sé. Los que beben en botellones son producto cultural de este tiempo idiota que vivimos. No sé quien tiene la culpa si es que hay alguien que tenga la culpa de que los jóvenes se embrutezcan en descampados por ahí, bebiendo hasta no poder más, oyendo gamberradas acústica, como dice un amigo que está últimamente preocupado con que se le echen encima en su calle un botellódromso de estos. No tenemos remedio. Lo del amigo que se te fue, pues lo siento, no se puede decir otra cosa.Rafanoreply@blogger.com