10.4.11

El espejo del alma



Más que Dios, atento siempre a las inclinaciones más sinceras de sus hijos, la cara de este hombre parece que se la puso un ángel caído. Uno de esos de ocupan las mejores páginas de la literatura gótica. Uno a sueldo de Dan Brown. El ángel sin glamour ni fotogenia. La mía no sé a estas alturas quién me la dio. En el fondo, la suya, ésta, poco importan. Pero a veces cómo entorpecen.

8 comentarios:

  1. Anónimo4/10/2011

    Infinita mala leche dominical, pero así me gustas más.-



    Ana

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  2. Anónimo4/10/2011

    Ay, ay, ay, ay ,ay

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  3. No estoy seguro de que el rostro es el reflejo del alma, porque en tal caso difícil lo tiene Ratzinger, igual que Rouco Varela. Quiero pensar que hay algo más allá del rostro, pero es cierto que sus imágenes no expresan mucha espiritualidad ni la misma creencia en un más allá. La iglesia ha de gestionar un imperio demasiado grande para convertirse en humilde y empezar desde cero. Pero no quedará otra.

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  4. En la realidad, como en el cine, un buen rostro suele ayudar a sacar adelante una interpretación mediocre. En el caso del Papa, el rostro debería ser el espejo del alma.

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  5. Yo creo, Ramón, que es el alma del espejo (en su sentido etimológico: speculum, instrumento de mirada). ¡Qué yuyu! (como dicen los anónimos y J.G.)

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  6. Larrea4/11/2011

    Yuyu teológico, miedo a estos cafres, terror vaticano!!!!!

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  7. Larrea4/11/2011

    Yuyu teológico, miedo a estos cafres, terror vaticano!!!!!

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